hablemos de mi, mientras las hormigas devoran el sol, j estiven medina ortiz (aka señor piedra)





Luego de la segunda edición de Norcorea de Kevin Castro, la editorial Poesía sub25 está en el proceso de traernos el libro Hablemos de mí, mientras las hormigas devoran el sol de J Estiven Medina Ortiz, primer libro de poesía de este autor que promete entregarnos una visión resumida de su talento. La cita es este viernes 15 de setiembre en la librería del Centro cultural de la PUCP, Escena Libre en el distrito de San Isidro (Av. Camino Real 1075, San Isidro 15073) donde contaremos también, como previa al evento, un conversatorio tratando el tema de la poesía joven en el Perú con poetas invitados como Braulio Paz, Francisco Cerna y Valeria Román.
Los esperamos.




Mientras me cuentas lo bien que te ha ido, yo apunto al sol con una pistola que formo con los dedos


La vida fue un desperdicio que nos dejó contentos
Hazme un espacio para ver juntos el horizonte que se guarda en nuestra mente
O inclina tu cuerpo al mío para confirmar que algún día sospecharon con irse.
Hemos leído nuestros poemas irradiando esa luz que se descompuso al contacto del sol
El sol fue cruel
pero eso no nos impidió ser felices y hacernos cosquillas y besarnos sólo para sentir cómo la vida se nos escapaba de nuestras manos.
Luego seremos nosotros los que exijan ser sepultados!
El trabajo ha dejado su olor nuestro cuerpo
Hablo de ti para no sentirme solo
Y porque además has ejercido la confianza que nunca tuve
No he trabajado con ánimo porque la muerte llamaba a mi puerta
nunca quise abrirle
pero un día le abrí
porque pensé que sería como el sexo brutal entre nosotros.
Hemos sido optimistas y tachado algunas palabras
Y nos hemos contado todo con una resignación respetable
Que no lo hemos hecho tan mal
hubiera sido peor no haber hecho nada
Quizá el sol es un globo que quema nuestras cabezas porque está triste.
Nunca tratamos de explicar ese rencor que le tuvimos:
Si no fuera por él 
Estaríamos muriéndonos de frío
Somos unos desagradecidos que no tienen el mínimo reparo en usarlo en metáforas tontas.
Es como si te dijera
Cambia esa canción 
Que me recuerda a esas cosas desagradables
Y luego nos pusiéramos a bailar por siempre.
Mi corazón
Es un montón de hormigas
Yendo a devorar el sol
que es la muerte.









Dos Poemas del Señor Cadáver



I

Decir yo lloro es quebrarse frente a una comunidad expectante. Decir yo me quiebro es confirmar la fragilidad de la que se está hecho. Decir soy frágil es estar consciente de que la muerte es una posibilidad latente, aunque la muerte siempre es eso. Decir soy consciente de mi fragilidad es admitir valientemente que se es cobarde. Decir soy cobarde despierta la sospecha de que se está enfermo. Decir estoy enfermo, no es más que confirmase vivo. Decir estoy vivo es casi lo mismo que decir estoy muerto, Sólo que en el primer caso el tiempo es como un gusano hambriento que ronda el cuerpo y en el segundo el gusano mira enternecido y saciado.



II

Una herida, una sonrisa de chorreados bordes rojos, una sonrisa de ironía, de problema, de verse atrapado indefenso en la sombra del llanto. Una herida color llanto, qué trazo ordinario se hiende en mi cuerpo, como venido de un largo viaje.
Una herida, qué mal te hace. Y perdona por mirarla con desconfianza y pena, me duele tanto como a ti, ya no quiero apretar los párpados conteniendo el derramamiento, ni ascender como burbuja y expandirme en el preciso momento en que comprendo que desaparezco. Soñar es una manía sobrevalorada.
Prefiero la inmovilidad, la inmunidad del que se trepa en lo alto del vacío cuando la inundación es inminente, también prefiero la inmunidad al tiempo, detesto la reiterativa confirmación de estar vivo.
Tiempo dócil, desmedido y violento, tiempo de bolsillo, de caramelo partido en pedazos para endulzar la boca y disimular el tufo de la desesperación.
Prefiero la inmaterialidad, la mala memoria, el oportunísimo desvío de la realidad, el estar echado pensando en el dolor de cabeza. Prefiero la mosca atrapada en mi mirada, atadas sus alas a mi mediocre vuelo a ras del suelo.
Prefiero sacudir mi perforado cerebro, atiborrado de esos gusanos que sobreviven con aire maligno, que no se esconden por tenerme pena. Preferiría ser un insecto imperceptible a tener que odiar a dios. Inventar un dios para odiarlo.
Creo que partirán sin mí.
Porque no están para recoger cadáveres (o heridas colmadas o heridas colmenas). Sólo heridas, sólo espasmo.
Y avanzar.










:(


Si empezaras a echarme en cara lo mal que he ido
actuando
y despreciaras mi afición de conservar los frascos
de los perfumes que alguna vez usé                                              
y te repugnaras en mi descuido
de no limpiar el vómito que huyó de mí.
Si no me ayudaras a reconstruir mi existencia
a partir de un borroso indicio.
Si tan solo amenazaras con dejarme
Como a un niño abrazando un escuálido peluche
en un auto que se pierde en la oscuridad de la orfandad
Estaré tan lejos que encenderé un cigarro
E inmediatamente
Después de retener un poco de humo en la boca
Lo apagaré
iré aflojando los labios mientras todo eso asciende
como un animalito despreciado
hacia la noche
irá tomando la forma de nuestro problema
recordaré casi involuntariamente lo bien que dormía
contigo/
te odiaré en el desierto de mi pena
y odiaré ésta personalidad que se fue endureciendo con
los años no pudiendo yo hacer nada
me dejaré caer mientras todos los abismos llevan tu
nombre.
Si empezaras a echarme en cara lo mal que he ido
actuando
te diría que todo esto constituye parte de una novela
que he ido escribiendo,
que no te creas tan especial
que puedo teclear unas cuantas palabras
y cambiar la historia.













Canción de cuna


I

                   Cansado/ evocas tu estadía en el vientre de mamá

Y luego te  hallas en el vientre cálido de mamá:

                Un vientre rayado de un montón de arcoíris  (perfecto ámbar líquido).
 Mamífero enloquecido,
Eres en él
                 planeta cargado de emociones resplandecientes/
             que disparan dientes hasta lo alto del cielo/ celebrando el venidero grito /contenido/ y el dolor que ata al ser humano
al temor
Que es un insecto que está empezando a tener las alucinaciones/ en donde una gota de lluvia
        cae
      como
        una
      piedra
         en
          el
      agujero de
  esta  historia.





II

Pero ya estás viejo para ir añorando tu nacimiento y todo lo maravillosamente sucedido antes de eso (quiero decir, tu plácida inexistencia)
Y además no recuerdas con claridad. 
La belleza consiste / óyeme bien:
En poner una y otra vez la canción que canta Joey Ramone  y
Quebrarte mientras bebes una cerveza con la misma incertidumbre con que percibes cada crujido de tu cuerpo…
Frágil por el tiempo/ y para el tiempo
                                                que nos queda siempre debiendo algo.
                                Cuerpo helado que exhala ese incendio
mientras esperas
que algo en ti halle la temperatura del equilibrio.
(Oh, relojes ruidosos,  corazones hendidos/  por donde cada gota de sangre cae
 cumpliendo la función del cálculo
                                                de los intervalos de tus pasos).
Tu cuerpo caverna
en donde, al calor de una hoguera, abrigas la timidez/ y ensalzas tu único temor de concebir la belleza como una bestia indomable.
Lo de la cerveza no es una condición imprescindible/ puedes poner la canción (una y otra vez) y escucharla solo/ sin hacer algo/
Pero te advierto que la incertidumbre puede ser irresistible y torpe
Entonces,  tu soledad llegará a parecerte la más estúpida y necesaria en esta noche de
Estrellas que vienen a ti /a coronarte/ premiarte con una alucinación en sus estómagos.

Ya no pienses en tu nacimiento, por más conmovedor que sea el recuerdo que algunas mujeres y tu madre te hayan ayudado a reelaborar.
Piensa mejor en:
-         Que pronto egresarás de la universidad,
-         Que tantos cigarrillos no han terminado destruyéndote y no has desarrollado ningún tipo de dependencia,
-         Que estás pensando en dejar el hábito de fumar porque esa chica te lo pidió con tanta ternura que lo dejarás, como también te pidió que la dejaras días después. También piensa en eso.
-         Que estás aquí, escribiendo, después de todo, un poemario relativamente decente (esperemos).
(Estás avanzando por una línea que va hacia la muerte, pero aquello no debe preocuparte mucho)
Ni siquiera es un camino lo que vas pisando/ es apenas una línea imaginaria/ la trayectoria de algún dios sentimental.






                                                               III

Un día, antes de morir/ darás una fiesta en donde te entregarán un obsequio: una cajita mal forrada, que tras leer la breve nota adjunta (“Esperamos que te haga feliz”), desgarrarás con entusiasmo infantil y hallarás dentro un ataúd pequeñito/ muy hermoso
 Y dirás:
                                Aquí no quepo
Y te echarás a reír/ y la canción estará allí/ repitiéndose indeclinablemente/ como haciéndote recordar que la belleza había sido todo el tiempo el mismo ejercicio
y que habías (no muy convencido al principio) acertado en abrazar.
También la belleza  te convencerá que tu cuerpo sí encaja en aquél ataúd
Y que estás cansado,
                            Como en un principio.
Esto te confundirá un poco y ya no podrás sonreír.
Algunos de los invitados te ayudarán a acomodarte en esa caja que te va pareciendo más graciosa a medida que tu cuerpo va encajando, perfecto.
Te dirán palabras de agradecimiento (por haberlos invitado a la fiesta = vida) y te harán señales de despedida con ambas manos  (lo cual te parecerá una exageración comprensible)
Tú ya estarás pensando:
No sé si me hace feliz,
Pero sí me hace bello.
E irás cantando la canción,
                                      Como en un principio:

Muy bajito/
/Serás feliz/


[Otro día]
¤









J. Estiven Medina Ortiz (1995) También Señor Piedra. Escritor, pintor y músico experimental. Próximamente publicará un poemario llamado “Hablemos de mí, mientras las hormigas devoran el sol” y un álbum de música llamado “Tv a color”. Actualmente prepara una colección de toda su producción sonora que sera llamada “Relatos de mi Juventud Sónica”.

 Facebook de Señor Piedra à https://www.facebook.com/Se%C3%B1or-Piedra-640856876076285/#     

Comentarios