POEMA DEBUT: reseña de miércoles para obligarse a vivir varias veces, milo bedregal








Reseña de miércoles para obligarse a vivir varias veces






Contra resumen. (Cuán arrogante resulta ser el vocero de lo que no saben los demás).



Keywords: Tanteo. Indeterminación.



Introducción. Pues sabías -o tal vez no- que tu música iba ocupándome por dentro. Que a pesar de lo que no ves ni piensas, te intentarías para mí. -Estar y ser aquí-



1. La estrategia del color.

He salido a la calle con el corazón dando respingos. Todo ha variado.

Del verde al negro. Del negro al rojo. Del taladro que no perfora la piedra, a los pies que no caminan. Todo, desde temprano, ha acompañado el apacible ritmo de un río. Descubro coloreados mis nuevos caminos. Surge la danza y el illariy bajo monocromáticos acentos.

Y es que el color también es ritmo. Pregunto. ¿Qué viaje es necesario para pintarse transparente? ¿Cuál el incoloro paisaje de nuestra propia existencia?



2. Anatomía de la mochila.

Si el viaje ha sido pleno, no vuelves a casa siendo la misma persona.

Comienzas empacando el cuidado que le dieron a tus dientes de leche. Enrollas el dolor y protocolos en tus jeans color crema. Rellenas los zapatos de la cínica incredulidad con la que te envolviste. Te das alimento y predispones el pie a emprender el camino. Estás fuera y estás en ti en la sombra del principio. Comienzas desempacándote lejos del lugar donde naciste. -todo lo que sueltas, me lo introduces-. (Inmersa en “Que sejas bem feliz” de Cartola) Alteras tu egoísta y sonoro soundtrack por el interruptor –al costado izquierdo- del diálogo sin rostro ni reloj. Farewell.

No todo puede acompañarte. No todo puede cargarse. Ni el mejor ni el peor de los casos.



3. El cuchicheo del sonido.

Algún día seré un poema y partiré en dos al silencio.

No todo tipo de silencio. Sino al silente que sin esperar la lectura de la imagen, hunde su edición, producción y video en aquel ruidito que trata de salir del diafragma.

Abro paréntesis: Apenas hemos sido escuchados y hoy soportamos lo que quieren cantar los pájaros. No habitamos nuestros sonidos y nuestros tonos suenan vacíos. Cierro paréntesis.

¿Quién sino tú puede hacer el álbum minimalista y platinum -de excelsas virtudes- de lo que somos? (No hay más que esto) Los silbidos, el lamento, también amor, también cariño.

Cuchicheamos algo todavía. Cuchicheamos con menos recursos que palabras.



Conclusión. ¿Queda algo más por decir? -Estamos y somos aquí-



Anexo 1. En una esquina, derramarse en la experiencia de Videofilia y otros síndromes virales.





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